Inicialmente abro este espacio para personas que conozco, con quienes he trabajado o colaborado. También para aquellas que leo en redes sociales y blogs y me despiertan curiosidad e interés. Un espacio en el que el lenguaje escrito es una vía de comunicación, reflexión y aprendizaje, para que compartan sus realidades.
Un lugar de desahogo donde construyan momentos que tengan su propio ritmo, sabor y devenir.
No obstante, estoy abierta a propuestas nuevas, a desconocidos que quieren compartir sus realidades. Así que, lector desconocido, toca mi puerta y hablemos.